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martes, 11 de abril de 2017

CRISTIANOS PORTADORES DE LUZ Y ESPERANZA

Los cristianos debemos ser portadores de buenas noticias, portadores de luz y esperanza. No debe importarnos el tiempo o las circunstancias que nos rodean para cumplir con lo comisionado por nuestro Señor Jesucristo. Siempre debemos mirar hacia delante, puesto los ojos en Jesús, en el autor y consumador de la fe. 

Ser comisionados por Dios para trabajar en su obra, es un gran privilegio y a la vez, una gran responsabilidad; no debe tomarse a la ligera y se debe estar a la altura de ese llamado. 

La dependencia de Dios y el estar alineados con su palabra, determinará el éxito de nuestra labor. El apóstol Juan en su evangelio nos describe esta verdad cuando nos dice: "el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid" (Jn 15:4). La permanencia en él Señor (la vid), la permanencia en su presencia, la permanencia en su palabra, nos dará esa vida abundante para ser transmitida a otros que la necesitan. 

Que maravilloso es saber que contamos con una fuente de vida inagotable capaz de saciar al mundo entero; y que alegría es saber, que él Creador del universo, pone su voto de confianza en sus hijos para extender su Reino aquí en la tierra. Es un privilegio que no tienen los ángeles que están en los cielos, sólo nosotros "sus hijos", los que fuimos redimidos con la sangre del Cordero.

Como pastor estoy agradecido con Dios por el privilegio que me ha dado a mí y a mi familia, de servirle en su obra. Es la experiencia más maravillosa que puede experimentar el ser humano, rodeada de aventuras, luchas, alegrías, lágrimas, desvelos, con aciertos y desaciertos, pero gratificante como ninguna otra. 
Amigo, hermano, si aún no has tomado la decisión de servirle al Señor ¡Ánimo! ¿Qué esperas?, no dejes pasar esta gran oportunidad, la vida está llena de oportunidades y hay que saberlas aprovechar cuando éstas se presenten. 

Levántate y dile al Señor: ¡Heme aquí!, úsame, quiero servirte; busca al pastor de tu iglesia y dile: quiero acudir al llamado de Dios, estoy listo para servir; con toda seguridad, tu pastor te guiará en lo que debes hacer. 

Si por el contrario llevas tiempo sirviendole a Dios, te animo a que continúes sin desmayar; lagrimas vendrán, pero sonrisas también llegarán y al final la recompensa...SIEMPRE ESTARÁ.


Tienes la "OPORTUNIDAD" de ser portador de luz y esperanza a las naciones con el mensaje del evangelio.

Sirviendo al Maestro
Ps. Luis Fernando Giraldo

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